Beneficios de la lactancia materna
La lactancia materna es, desde tiempos memorables y hasta la actualidad, una práctica indiscutible y la mejor e ideal forma de alimentar al bebé, aportándole los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo adecuado (Condori Quispe, W.W., y Ayca Castro, I., 2017).
La OMS y UNICEF también señalan que “es una forma inigualable de facilitar el alimento ideal para el crecimiento y desarrollo correcto de los niños”. Igualmente, mantienen que la leche materna debería ser el único alimento hasta los 6 meses, pudiéndose alargar hasta los dos años (obviamente, aquí ya no habría exclusividad si no que habría que introducir otros alimentos). Esto se centra en la teoría de que la leche materna se va adaptando a lo largo del crecimiento del niño para cubrir sus necesidades.
A pesar de tener presente todo ello, a día de hoy debido a diversas situaciones (poco tiempo, trabajo, imposibilidad de dar el pecho por distintos motivos, decisiones personales, etc.) la lactancia artificial, referida a los preparados para lactantes o preparados de continuación que se dan al bebé a través del biberón, pueden llegar a estar más presentes que la lactancia materna.
Siguiendo esta línea de alimentación y abriendo fronteras más allá que las relacionadas con el aporte nutricional, desde el departamento de logopedia a domicilio de Centro Lingua queremos centrarnos concretamente en el modo en el que influye, sea cual sea el tipo de alimentación, bien por pecho bien por alimentación “artificial”, el amamantamiento (de pecho o succión del biberón) sobre el desarrollo mandibular, muscular, control orofacial, etc. Por ello, es importante saber qué estructuras anatómicas y fisiológicas intervienen en los movimientos de succión y deglución y la forma en la que se producen estos dos fenómenos.
Dicho de otro modo… ¿cómo influyen el amamantamiento y el biberón en el desarrollo mandibular?¿puede tener esta etapa relación con las futuras alteraciones en las malas oclusiones dentarias que se pueden dar en los niños?¿el amamantamiento se relaciona con otros factores que no están relacionados con la nutrición del bebé? Vamos a verlo.
La succión y sus movimientos
El bebé hace una serie de movimientos, los cuales han de ser coordinados para conseguir sacar el movimiento bien del pecho o bien de un biberón. Si no hay organización y coordinación, la alimentación se verá afectada.
El sistema estomatognático se refiere a la unidad morfo-funcional ubicada en la región craneofacial y se encuentra constituida por tejidos y órganos, los cuales comprenden los maxilares, dientes, músculos, articulación temporomandibular, glándulas y componentes vasculares, linfáticos y nerviosos asociados (Lescano de Ferrer, A., y Varela de Villalba, T.). Es decir, lo que comúnmente se conoce como la boca y la mandíbula.
De hecho, según investigadores, el amamantamiento es una de las funciones fundamentales, pues conduce a un balance de la musculatura orofacial y es responsable de la futura maduración de los músculos de la masticación, ya que primero cada uno de los músculos están preparados para la función de amamantamiento y luego para cumplir una función más compleja, la masticación.
Gracias al reflejo innato de succión que presentan los recién nacidos, consiguen coordinar un conjunto de movimientos para que la leche salga del pecho de la madre. En este complejo movimiento, los labios forman un cinturón muscular dónde el labio superior tensa el frenillo labial y tracciona el maxilar superior estimulando el desarrollo óseo de la misma, mientras que el labio inferior cumple una función similar, pues permite el desarrollo del hueso y dientes de la zona inferior.
Por su parte, la lengua se encarga de llevar la leche al fondo de la boca para que se trague de manera refleja, esto lo hace provocando un vacío en la boca mediante los movimientos de ascenso y descenso en la zona anterior del paladar. Para aclarar este movimiento se presenta el siguiente vídeo:
Ventajas de la lactancia materna frente a la lactancia artificial
En la actualidad no es raro ver miles de diferentes diseños en las tetinas para biberones, pero… ¿llegan a ser tan buenos como el pecho de la madre?
Son varios los autores que han intentado saber si existen diferencias en la lactancia de un bebe que toma pecho, que toma biberón o que toma ambos. Moral, A., et al, 2011 encontraron que el número de movimientos de succión y de pausas era más pequeños y más breves en los bebés con lactancia artificial que en aquellos que se alimentaban con lactancia materna, mientras que los que tenían una lactancia mixta mezclaban ambos tipos de succión e incluso establecían su propio patrón de movimiento.
Por otro lado, tenemos investigaciones relacionadas con la lactancia y el desarrollo mandibular que exponen que la lactancia materna favorece un correcto crecimiento de los maxilares, favorece la actividad muscular, la cual causa tensiones y fuerzas sobre los dientes y estructuras de soporte, lo que conlleva todo ello a una oclusión normal, y por ende ayuda a prevenir las posibles anomalías dentales en la oclusión permanente (Condori Quispe, W.W., Ayca Castro, I., 2019).
De hecho, en el estudio de Lescano de Ferrer, A., y Varela de Villalba, T. se observó que los bebés que habían sido alimentados con lactancia artificial tenían un mayor porcentaje en la presencia de maloclusiones y menor porcentaje en oclusión normal, mientras que en los bebés alimentados con lactancia materna era a la inversa.
Además, los beneficios de la lactancia materna van más allá. No solo contribuye a un buen desarrollo de la estructura ósea y muscular de la mandíbula y una buena oclusión dental, sino que también se encuentra relacionado con otros muchos factores que no tienen nada que ver con los anteriores, los cuales se citan a continuación:
- Se trata de un alimento óptimo a nivel nutricional, proporcionando nutrientes de alta calidad al bebé. Además, se adapta a las necesidades del bebé, por ejemplo, la leche inicial es distinta de la leche final, ya que esta última tiene mayor concentración de lípidos.
- La leche materna protege al lactante contra las infecciones, pues cuenta con células, factores antiinflamatorios, factores antibacterianos, antivíricos…Luego, es potenciadora de la inmunidad.
- Menor riesgo de diarrea.
- Menor riesgo de otitis y meningitis.
- La lactancia favorece el vínculo madre-hijo/a.
- La leche favorece el desarrollo mental e intelectual.
Una vez puestos en situación y dejando claro que, no queremos hacer ver que un tipo de alimentación es mejor o peor que otro y que el modo escogido tiene que ir en base a las preferencias, opiniones, decisiones y situaciones personales de cada madre, queremos hablaros más en profundidad de otros beneficios de la lactancia materna que van más allá de los aportes nutricionales.
Beneficios de la lactancia materna
Como comentamos, a parte de los aportes nutricionales que la alimentación con leche materna puede dar, son otros muchos a nivel muscular y estructural.
- Ayuda al correcto desarrollo de la musculatura orofacial. Necesario para dar el paso a la alimentación sólida y al favorecimiento de la aparición del lenguaje.
- Los músculos orbiculares y buccinadores se desarrollan de una forma más rápida y correcta favoreciendo, entre otros, un correcto sellado labial haciendo que no se produzca por ejemplo, sialorrea (babeo, muy típico en bebés y niños pequeños).
- La mandíbula crece. Los niños cuando nacen tienen la mandícula “corta” pero en unos meses alcanza el tamaño adecuado, si esto no se produce puede aparecer la conocida “retrognatia”, problemas de maloclusión, etc.
- El bebé que toma pecho, succiona en un 10% más veces que el niño que se alimenta por biberón. También tiene que ejercitarse aún más a través de determinados movimientos para poder adaptarse y agarrarse bien al pezón.
- Haciendo referencia a la posición de la lengua, otro punto muy importante para el logopeda, podemos ver que:
- Mientras que el niño se encuentra mamando, la lengua apoya en el lugar correcto haciendo que el paladar coja la forma adecuada (se aplana y redondea) haciendo que a futuro pueda tener maloclusiones.
- Otro punto importante es que al colocar la lengua en el punto correcto, el bebé respira por la nariz en lugar de hacerlo por la boca por lo que nos evitamos un posible respirador oral.
Bibliografía
- Blázquez García, M.J. (2000). Ventajas de la lactancia materna. Medicina naturista, 1. 44-49.
- Condori Quispe, W.W., Ayca Castro, I. (2019). Relación entre la lactancia materna y artificial con el crecimiento mandibular en niños de 0 a 6 meses de edad atendidos en el centro de salud la Esperanza. Revista Odontológica 1. 15-19.
- Lescano de Ferrer, A., y Varela de Villalba, T. Influencia de la succión deglución sobre el crecimiento y desarrollo orofacial.
- Moral, A., Bolibar, I., Seguranyes, G., Ustrell, J.M., Sebastiá, G., Martínez Barba, C., y Ríos, J. (2011). Mecánica de la succión: comparación entre la lactancia artificial y la lactancia materna. Matronas Prof, 12(1). 9-17.